Este 9 de febrero se cumple un año de la muerte de Ángel Manuel Moreno, de 14 años de edad, y las circunstancias de su muerte siguen sin esclarecer; dejando a su vez muchas dudas sobre las verdaderas causas y responsabilidad de su fallecimiento. El adolescente perdió la vida mientras se encontrada bajo la protección de una institución de asistencia pública del Estado mexicano y bajo fuertes denuncias sobre su presunto asesinato a manos de un funcionario del lugar.
Al día de hoy, la verdad y el acceso a la justicia siguen siendo una demanda pendiente en este caso, en especial, luego de que se ordenara la inmediata cremación de su cuerpo con la cual desapareció cualquier evidencia que pudiera identificar las causas de su muerte.
Desde de la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM) queremos recordar también que la situación de Ángel estuvo vinculada a otras irregularidades sucedidas en instituciones de niños, niñas y adolescentes, a cargo del Estado, entre las que se incluyen su traslado irregular a la sede del DIF Fabriles, tras participar en la protesta de una sección de DIF Capullos, la tarde del domingo 28 de noviembre de 2021, cuando un grupo de niños y adolescentes se unieron para denunciar presuntos malos tratos en el lugar.
REDIM manifiesta su preocupación por el retardo, la falta de resultados y avances en el acceso a la justicia en la investigación de este caso. Llamamos la atención de las autoridades, porque no se puede seguir normalizando que el Estado mexicano deje impune la muerte de un niño y muy especialmente si estaba bajo su custodia. Ángel simboliza hoy a todos los niños, niñas y adolescentes que han sido víctimas de una larga cadena de abusos desde su nacimiento y que, en la peor de las circunstancias, pierden la vida a manos de quienes tienen el deber de protegerles.
Al cumplirse un año de su fallecimiento, no olvidamos su muerte y solicitamos a las autoridades que se retome el curso de las investigaciones para que la justicia pueda operar y responder al compromiso que se estableció de emitir los resultados a la brevedad, con base en una investigación objetiva y expedita que establezca responsabilidades sobre este caso.
Asimismo, pedimos que se revele y penalice a la cadena de custodia con base a las evidencias de los hechos denunciados. Es primordial también que se le dé garantía de seguridad a las personas que pudieron haber sido testigas de lo ocurrido con el niño para que, quienes todavía tengan más información, puedan denunciar sin temor ni represalias.
Este urgente llamado de #JusticiaParaÁngel, impulsado por organizaciones de la sociedad civil en México y Estados Unidos, hoy reúne a casi 15 mil firmas ciudadanas de personas que, a través de la plataforma Change.org se siguen sumando al clamor de justicia para pedir el esclarecimiento por la muerte de Ángel.
Tania Ramírez Hernández
Directora Ejecutiva
Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM).
#JusticiaParaÁngel
